Ojeras.
Las ojeras no solo son el resultado del cansancio y falta de sueño, la realidad es que el tono azuloso a verde que observamos debajo de los ojos obedece a:
1.- Los vasos sanguíneos que pasan por debajo de la superficie de la piel, esta parte es mucho más delgada que otras zonas, y con la edad la piel se hace más frágil, los vasos sanguíneos se encuentran más cerca de la superficie, lo que nos da una apariencia obscura.
2.- El exceso de melanina (hiperpigmentación) que se acumula en la piel debajo de los ojos, también es causante del tono obscuro.
3.- La herencia: las personas con antecedentes de ojeras tienen una mayor posibilidad de padecerlas.
4.- Raza: Las personas de ciertas razas, como la mediterránea, desarrollan más ojeras porque tienen más pigmentación que otras.
Debemos evitar:
1.- Frotarnos los ojos: la pérdida de elasticidad y colágeno de la piel debajo de los ojos, así como las alergias, son factores que contribuyen a las ojeras y si encima nos frotamos los ojos, contribuímos a la aparición de las mismas.
2.- Dormir boca abajo: Cuando dormimos boca abajo se acumula líquido debajo de los ojos y una presión constante sobre la piel facial puede causar arrugas más profundas.
3.- Desmaquillarse: Todas las noches hay que quitar la pintura de los ojos con un desmaquillador suave y evitar tallar fuerte.
4.- Usar gafas obscuras: Los lentes obscuros deben contar con protección UV. El color del lente no tiene nada que ver con la protección a los rayos UV.
5.- Inflamación o cansancio en los ojos: Si utilizamos algunos remedios caseros para relajar los parpados nos ayudara a refrescar, reducir la hinchazón y en algunos casos aclarar la piel; podemos usar rodajas de pepino, bolsas de té de manzanilla, miel etc.
A diferencia de lo que se creía hasta hace poco, el sol, el cansancio o la falta de sueño no producen directamente las ojeras pero sí que las empeoran haciéndolas más visibles.